“Sospechosismo” 153-C
Por Octavio RODRÍGUEZ FIGUEROA
CHOLULA.- Tenía que pasar. EL CONTAGIO DEL COVID a nuestro presidente, tarde o temprano, tenía que suceder a casi un año de iniciada la pandemia. Con la misma rutina y su alta actividad, entre tanta gente que por su afán de plantearle los problemas que existen en este bendito país, se le acercaban hasta con la simple intención de saludarle.
Sin embargo, mi teoría es que al acudir a la mañanera, la secretaria de seguridad que recién estuvo enferma con ese padecimiento y usó el mismo micrófono, tal vez por ahí se filtró ese maldito virus, y nadie lo desinfecta al cambiar de interlocutores, como se ve que lo realizan en las dos cámaras, pero para el caso, ya no tiene importancia, más que para tomar precauciones.
TODO México y gran parte del mundo, está lamentando esto, no así con algunos opositores extremistas miserables, a los que no les importa la vida de nadie.
A Donde el Corazón se Inclina, el pié Camina
Y es que jamás interrumpió la intensidad de su trabajo. Aun así, enfermo, se sabe que tiene en sus manos las riendas del país y está al pendiente de todo. Por eso en este espacio, alguna vez dijimos que los opositores que le temen a la reelección de AMLO, se dieran cuenta de que si tomamos como referencia la escasa intensidad con que los anteriores mandatarios trabajaron, prácticamente AMLO se está reeligiendo en los hechos por utilizar el tiempo al doble o más.
Aquellos fueron puro show, o “Atole con el dedo”, en cambio el presente es real, tangible, que muchos no quieren reconocer, aunque lo estén viendo, por lo que su campaña de junio, se caracterizará por decir a todo NO, NO, NO, como ya lo están demostrando en su publicidad televisiva. El 4o mejor Presidente de la 4ª transformación, está en peligro, Desde esta modesta columna, deseamos que se recupere, no por ser el presidente, sino por CUESTIÓN HUMANA.