Nombre: Jorge Samuel
Grupo: nuevo amanecer
Distrito: 11°
Área: oriente uno
CHOLULA.- Hola soy Jorge y soy un alcohólico cuando llegue a ALCOHÓLICOS ANONIMOS (AA) no fue por convicción, mi madre y mi hermano mayor me intentaron en un centro de recuperación. En ese lugar había un Grupo de AA, ahí me hablaron del maravilloso programa de AA, con el cual entendí que tenía que derrotarme ante mi impotencia para beber alcohol y mi vida que ya no manejaba. Con el tiempo vi que, al admitir estos hechos, los alcohólicos ganamos humildad.
Me hablaron de que para tener humildad era necesario tener un dios amoroso, pero para tener humildad era necesario tener un Dios amoroso, pero para acercarme a él tuve que conocer por qué razones no lo hacía. El segundo paso me ilustro mucho. Yo era una persona rebelde, un beligerante. Poco a poco me deje guiar y aprendí a ser amistoso con diferentes personas que sufrían lo mismo que yo la terrible enfermedad del alcoholismo, por que yo no aprendí a ser solidario con nadie.
Con el tiempo aprendí a ser sociable, pues llegué a un estado salvaje, aprendí a convivir con mis compañeros, que hoy puedo decir que son mis amigos, pero ¿Cómo logré ser uno más? Pues conociendo las 12 tradiciones, respetando el bienestar común del Grupo; además de trabajar con lo que es el Tercer Legado como parte de la recuperación que me ofrecía el programa.
Fui una persona pobre, de niño carecía de muchas cosas, pensaba que era humilde, pero los compañeros me hicieron ver que en realidad era muy soberbio, porque nunca admitir mis condiciones de vida. Cuando decidimos ¿Por qué tengo que estar aquí y vivir esto?, ahí ya hay un problema de falta de humildad.
Por eso el servicio es la única forma de llevar a la práctica el Programa, al hacerlo, se asegura la sobriedad y mantiene vigente el proceso de recuperación.