* Trabaja en excavación de zanja, quedó sepultado * En el barrio El Calvario, la tragedia
Por Humberto MÉNDEZ RAMOS
CUAUTLANCINGO.- En los momentos de estar trabajando en la excavación de una zanja, para introducir la tubería de la red del agua potable, un alarife de 24 años, quedó sepultado al desprenderse una de las paredes de la zanja, perdiendo la vida, por el peso recibido y la falta de oxígeno.
Pasaban de las 14 horas de este miércoles, cuando los trabajadores encargados de introducir la red de agua potable por calles del barrio El Calvario, empezaron a lanzar gritos pidiendo ayuda, uno de sus compañeros había quedado sepultado por una gran cantidad de tierra.
Las primeras versiones de la manera en cómo ocurrió todo, es que ya estaba la zanja, introducían la tubería y la iban acomodando, en ese lugar, de momento el alarife de 24 años, se hundió de una de sus piernas, la tierra estaba húmeda, floja, y se desmoronó bajo sus pies, tragándoselo.
En milésimas de segundos, había quedó sepultado, sus compañeros empezaron a remover rápidamente la tierra, usando algunas herramientas, ras unos minutos lograron llegar a donde estaba el cuerpo, que poco a poco fueron descubriendo.
Finalmente lo pusieron a la vista, ya estaban paramédicos, quienes revisaron el cuerpo y determinaron que y ano presentaba signos vitales, teniendo que dar parte al personal de la Fiscalía del Estado, para que acudiera a realizar las diligencias ministeriales y se deslindaran responsabilidades.