* La mayoría jóvenes desertores de la educación
Por Epigmenio ROJAS CASTRO
CHOLUA.- En las últimas semanas, se ha incrementado el número de vendedores de todo tipo de producto, alimentos y bebidas, así como los limpiaparabrisas o limpia-carrocerías, y malabaristas, siendo principalmente jóvenes desertores de la educación, y mujeres, quienes buscan ganarse la vida de manea honrada.
Para muchos no es fácil el poder plantarse en la esquina de una calle o bulevar, para ofrecer bolsas con fruta, golosinas, churros, tortas compuestas, bebidas azucaradas, bolis, o bien artículos diversos, pero la necesidad los hace aguantarse la pena, y ganarse unas monedas, como nos lo comentó Jorge N., de 19 años de edad, vecino de Manantiales.
Él, nos dice “Sin foto, ni video, ya no quiero ser tan famoso (ríe un poco), para mí y otros con los que e platicado, no es fácil, no estamos acostumbrados a esto, pero la situación en casa ya es desesperante, mi papá ya no tiene chamba, trabajaba en Puebla, le anda buscando, pero no encuentra, él empezó hace una semana vendiendo fruta allá por Cruz del Sur, yo me vine aquí en Manantiales, y vendo jugos.
He buscado trabajo de lo que sea, pero no hay suerte, y lo entiendo, todos estamos igual, escasos de dinero y con muchas necesidades. Vea, los chamacos la hacen de payasitos, otros solo estiran la mano, no tienen para vender algo, porque hay que comprar la caja de dulces, mazapanes, el trapo, botella, y todo para limpiar parabrisas, o bien la carrocería, es poca la inversión, pero no hay ni para eso”.
(Hacemos una pausa, las lágrimas le llenan los ojos) reiniciamos, y comenta “Ya no podré estudiar al menos por este año, mi papá y mamá me piden que siga, pero con que ojos dinero tuerto. La mayoría estamos igual, eso sí con muchas ganas de salir adelante”, terminó señalando al momento de alejarse y perderse entre los carros.
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