* Fue en una iglesia de Fresnillo * El pequeño Caleb, de tres años de edad, fue con su madre a una misa en la que se ofrecían flores a la virgen
ZACATECAS.- En los últimos siete días, Zacatecas ha enfrentado un recrudecimiento de la violencia con el abandono de cuerpos en diferentes puntos de la capital y de Fresnillo, la segunda ciudad más importante del estado.
Allí, la muerte de un menor de tres años, ocurrida en un ataque en una iglesia, ha conmocionado a la población.
Después de las seis de la tarde del jueves, dos hombres armados a bordo de una motocicleta irrumpieron en el templo de la Virgen de Guadalupe, en el centro de Fresnillo; de acuerdo con la Fiscalía estatal, los agresores perseguían a un joven que intentó refugiarse en la parroquia.
En el ataque murió Caleb, un menor de tres años de edad, quien había ido con su madre a una misa en la que se ofrecían flores a la virgen; el hombre que quedó tirado en el atrio del templo, al que perseguían los delincuentes, murió este viernes en el hospital.
“Continuamos con el análisis de las cámaras de videovigilancia”, comentó Francisco Murillo Ruiseco, fiscal de Zacatecas.
“Este es el colmo, de plano no hay autoridad para esto”, comentó un habitante.
“Los niños, quien menos tienen que ver con todo esto”, señaló un habitante.
En redes sociales, familiares y vecinos de Fresnillo manifestaron su hartazgo por la violencia; anoche, de manera espontánea familias con niños empezaron a llegar a la explanada de la iglesia a colocar veladoras y muñecos de peluche en memoria de Caleb.
“Esto si consterna al pueblo de Fresnillo, señoras grandes con sus chiquillos que vienen”, dijo un habitante de Fresnillo.
“Esto no es lo que queremos para nuestros hijos, esto no es lo que queremos seguir viviendo”, subrayó un habitante de Fresnillo.
Este viernes el niño fue despedido en la comunidad de San Miguel de Sosa.
Por la noche hubo una manifestación para exigir justicia frente al Palacio Municipal.
“Nos unimos a todas las voces de exigencia, esperemos que ahora a ver si un poquito le abre el corazón al fiscal y da resultados”, expuso Saúl Monreal Ávila, presidente municipal de Fresnillo.
En un reciente recorrido por las calles de Fresnillo, En Punto documentó los estragos de la violencia de grupos criminales, principalmente en la colonia Abel Dávila.
“Están abandonadas las casas por completo unas saqueadas, ya ni puertas, ni ventanas. Son como guaridas”, indicó un habitante.
“Obviamente todos estos eventos han ido evolucionando a una situación más violenta que, a veces uno cree que no puede haber cosa peor, pero siempre hay algo peor”, dijo otro habitante de Fresnillo.