Lalo y su libertad
CHOLULA.- “Estás gobernando por primera vez libre, eres libre, ¿te das cuenta Eduardo? (…), aquí a nadie se vigila, ni se espía”, lanzó el gobernador Miguel Barbosa Huerta a Rivera Pérez.
Este tipo de mensajes de buena lid, se lanzaron entre sí el gobernador Miguel Barbosa Huerta y el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez.
Más claros, ni el agua.
“Me toca hablar bien de él, pues ni modo que no”, dijo el gobernador al tiempo de reconocer la amistad con Rivera Pérez desde que eran legisladores.
Y el alcalde, ni la concurrencia en el Centro de Convenciones, pudieron contener la risa, como vaticinando el futuro, uno cada vez más cercano.
También a la gran mayoría (sufrida en carne propia o no), recordaron a la administración estatal, al ser un mensaje en clara referencia del finado ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.
Es de todos sabido, que Rivera Pérez, cuando fue edil por primera vez, fue víctima de los ataques y lo recordó el actual mandatario.
De este modo y al señalar que tendría que hablar de él (Eduardo Rivera), enfatizó la amistad de más de hace 20 años cuando eran compañeros en San Lázaro.
El edil minutos antes, reconoció que tiempos y circunstancias cambian constantemente, al señalar que los ciudadanos y Dios tendrán la última palabra, al referirse de su futuro político.
“Para quienes me preguntan acerca del futuro les digo, que los tiempos y las circunstancias cambian constantemente y las luchas también y un buen político debe de estar preparado”.
“Soy un hombre de lucha, que siempre está listo para enfrentar las batallas que vengan, Dios y el tiempo abrirán el camino y ustedes los ciudadanos, tendrán la última palabra.”, dijo.
Además, dejaron sobreentendido ambos gobernantes, que continuará la coordinación estrecha entre el gobierno del estado y el ayuntamiento capitalino, por primera vez en muchos, pero muchos años.
En tanto, el alcalde tuvo casa llena y con decenas de personalidades de la vida política nacional, pero sobre todo, para los que buscan señales futuras, la presencia de líderes nacionales de partidos como el de la Revolución Democrática (PRD), Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI).
Aunque la falta de Alejandro Moreno, mejor conocido como Alito, dio mucho de qué hablar, sobre todo por la posible y necesaria alianza, si se quiere el triunfo en 2024.
El mensaje político está dado.
Al parecer, Eduardo Rivera ya probó la libertad y le gustó, como dice la canción.
Ahora se verá que tanto la aprovecha.
Tiempo al tiempo.