* Tuvo el tercer pontificado más largo en la historia de la iglesia católica y realizó 104 viajes en los que visitó 129 países
El mundo católico celebrará el 18 de mayo con varias iniciativas el centenario del nacimiento en 1920 de Juan Pablo II.
Fue en Wadowice, un pequeño pueblo en el sur de Polonia, en el seno de una familia humilde, donde nació Karol Wojtyla, quien se convertiría en el primer papa no italiano, con numerosos récord en su largo pontificado.
El diario vaticano “Osservatore Romano” dedica hoy un número especial de varias páginas a la vida de San Juan Pablo II. En la portada digital del diario, que se ha dejado de imprimir debido a la pandemia, se observa la foto del papa polaco y un pensamiento de Francisco pidiendo su intercesión”.
“Recordando el centenario del nacimiento de San Juan Pablo II, recurrimos a él para pedirle su intercesión: Intercede para que siempre permanecemos fieles al Evangelio. Intercede para que sepamos cómo abrir las puertas a Cristo (…) Intercede para que sepamos cómo responder a las necesidades de nuestros hermanos que sufren”, se lee.
También el papa emérito Benedicto XVI, retirado desde el pasado febrero de 2013, escribió una carta para con motivo del centenario del papa con quien compartió muchos años de trabajo en la Curia.
Benedicto XVI, de 93 años, estuvo al lado Wojtila durante casi todo el pontificado al estar al frente de la Congregación para la Doctrina de la Fe desde 1981
“Cuando el cardenal Wojtyla fue elegido sucesor de San Pedro el 16 de octubre de 1978, la Iglesia estaba en una situación desesperada”, recuerda en su carta el pontífice alemán.
El papa emérito añade “la tarea que superaba las fuerzas humanas esperaba al nuevo Papa. Sin embargo, desde el primer momento, Juan Pablo II despertó un nuevo entusiasmo por Cristo y su Iglesia. Primero lo hizo con el grito del sermón al comienzo de su pontificado: ¡No tengan miedo! ¡Abran, sí, abran de par en par las puertas a Cristo!. Este tono finalmente determinó todo su pontificado y lo convirtió en un renovado liberador de la Iglesia”.
Francisco celebrará este lunes una misa especial para recordar los 100 años del nacimiento del pontífice polaco desde la capilla de la tumba del santo que se encuentra en la basílica vaticana”.
La misa servirá de homenaje a Karol Wojtila, papa desde el 16 de octubre de 1978 hasta su muerte el 2 de abril de 2005, y canonizado por Jorge Bergoglio en 2014.
Tuvo el tercer pontificado más largo en la historia de la iglesia católica, de casi 27 años (1978-2005), beatificó a mil 340 personas y canonizó a 483 santos y realizó 104 viajes en los que visitó 129 países.
El 13 mayo de 1981, dos balas disparadas por el turco Ali Mehmet Agca hirieron de gravedad al Papa mientras saludaba en papamóvil a los fieles durante la audiencia general en la plaza de San Pedro y después el terrorista fue perdonado por el pontífice que le visitó en la cárcel.
En estos días se ha publicado el documental “Wojtyla: La investigación” del periodista español José María Zavala, una cinta que recoge momentos nunca antes conocidos de la vida de Juan Pablo II y de un pontificado en medio de la guerra fría, del fin de la Unión Soviética y de la caída del Muro de Berlín y las varias conspiraciones para acabar con su vida.
El postulador de la causa de canonización del pontífice, el sacerdote polaco Slawomir Oder, también es el encargado del proceso para beatificar a los padres del papa polaco que avanza en estos días, según adelantó esta semana en una videoconferencia con periodistas.
Oder aseguró respecto a una de las mayores controversias del pontificado de Wojtyla: la falta de mano dura respecto a curas pederastas y en especial del caso del fundador de los Legionarios de Cristo, el mexicano Marcial Maciel, que “no se encontró nada que pudiera obstaculizar la causa de Juan Pablo II” y que el papa polaco “nunca encubrió a curas pederastas”.
Reveló Oder que después de atentado, el papa mantuvo una gran amistad con los médicos y que cuando uno falleció “fue a casa de la familia para rezar frente al ataúd y consolar a la viuda y a sus hijos”. Era como pide ahora Francisco “un verdadero pastor con olor a oveja”, aseguró el sacerdote polaco.