Indagando, Ando

«Violencia contra las mujeres: Un problema que persiste»

Por Mtro. Gerardo GALICIA

CHOLULA.- Desde tiempos inmemorables, las mujeres han sido relegadas a roles de sumisión debido a aspectos tradicionales y culturales, desencadenando formas insidiosas de violencia desde la infancia hasta la adultez. Aunque en la actualidad la violencia contra las mujeres se ha convertido en un tema central en la sociedad y en las agendas gubernamentales, los índices de violencia y feminicidios persisten de manera alarmante.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) realiza cada cuatro años la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH), proporcionando datos reveladores. Según el último estudio, el 66.1% de mujeres mayores de 15 años ha experimentado al menos un tipo de violencia en su vida, ya sea emocional, económica, física, sexual o discriminación.

La encuesta desglosa estas cifras, mostrando que el 49% ha sufrido violencia emocional, el 34% violencia física, el 29% violencia económica o discriminación laboral, y el 43% violencia sexual. Al segmentar por ámbito, se revela que el 22.5% ha sufrido violencia laboral, el 25.3% violencia escolar, el 43.9% violencia de pareja y el 10.3% violencia familiar. Sin embargo, solo el 9.4% de las mujeres que han sufrido violencia han presentado alguna denuncia, lo que destaca la falta de confianza en los sistemas de justicia.

Los datos del INEGI también arrojan una cifra alarmante: 4.4 millones de mujeres en México declaran haber sufrido algún tipo de abuso sexual durante su infancia, siendo esencial destacar que el 88.4% no denunció estos hechos.

En un esfuerzo por entender la situación local, la empresa INDAGA llevó a cabo un estudio en la ciudad de Puebla entre 2022 y 2023. Los resultados son preocupantes, ya que el porcentaje de mujeres que han sufrido algún tipo de violencia ha aumentado en dos años. El miedo también es palpable, con el 81.3% de las mujeres manifestando temor a ser víctimas de agresiones por el simple hecho de ser mujeres.

El estudio también indaga en la percepción sobre los culpables de la violencia, revelando que el 40.1% atribuye la responsabilidad tanto a hombres como mujeres, mientras que el 32.1% señala a los hombres y el 24.6% a las mujeres.

Estos datos son inquietantes, especialmente porque las consecuencias pueden llegar a ser devastadoras, como lo demuestra el alarmante número de feminicidios en Puebla, que ya suman más de 50 casos hasta el momento. Este problema debe ser abordado desde diversas perspectivas: psicológica, jurídica, sociológica y médica.

Es imperativo que todos los sectores de la sociedad pongan énfasis en la gravedad de la violencia contra las mujeres. Si no actuamos con determinación, podríamos encontrarnos, lamentablemente, con casos cercanos, quizás incluso con nuestras propias hijas. La lucha contra la violencia de género debe ser una prioridad de todos, para construir un futuro donde las mujeres vivan libres de miedo y violencia.