Por: Jorge GÓMEZ CARRANCO
CHOLULA.- Cuando escuchamos “non petita, accusatio manifiesta” nos referimos a “excusa no pedida, acusación manifiesta” significa que toda aquella persona que se disculpa de una falta, sin que nadie se la haya pedido, tal disculpa le está señalando directamente como autor de la falta. Esta frase también la conocemos como “disculpa no pedida, culpa manifiesta”.
Ahora bien, en lo que va de su sexenio el presidente Andrés Manuel López Obrador ha visitado cuatro veces Badiraguato, Sinaloa, pueblo natal del famoso narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán, fundador del Cartel de Sinaloa, uno de los más sanguinarios del país, pues recordaran que al asumir la presidencia de la república mexicana no pasaron ni los tres meses en el poder, cuando fue a recorrer el pueblo natal del narcotraficante Guzmán fundador del Cartel de Sinaloa, un personaje que ha dejado miles de muertos, y el domingo pasado por cuarta ocasión López Obrador visitó Badiraguato y explicó a través de su cuenta de Twitter que su visita se debió a anunciar el desarrollo de sus proyectos en la zona: el comienzo de la vía que conectará a Badiraguato con las comunidades del vecino estado Chihuahua a través de un camino que pasará por el área montañosa, la plantación de árboles en 50.000 hectáreas, así como la creación de una universidad pública especializada en la formación forestal.
Recordemos que en una de sus visitas el mandatario federal causó polémica debido a que se bajó de su camioneta para saludar a Consuelo Loera Pérez, madre del el” Chapo” y dio explicación de que efectivamente la saludo y sus adversarios los conservadores hicieron un escándalo cuando es la propia ciudadanía mexicana que vio mal ese acto afectivo de codearse con la madre de un narcotraficante que efectivamente no ha participado pero la sumisión y su silencio la otorga como cómplice de todos los crímenes de su hijo pues jamás lo entregó ante las autoridades.
Muchos nos cuestionamos las supuestas visitas de trabajo del Presidente, nos resulta difícil de creer más cuando el declara que es mejor dar abrazos y no balazos por eso ahora que dice No voy a reunirme con el Cartel de Sinaloa y da explicaciones de sus visitas a Badiraguato pues deja mucho que pensar, y más aún cuando dice que habrá una quinta visita en los próximos meses a la tierra de gente trabajadora y debe la prensa dejar de estigmatizarlo. Pero el mismo es quien da de que hablar pues esta cuarta visita se dio de forma privada, por lo que no se permitió la asistencia de los representantes de medios de comunicación que acompaña al presidente de la república mexicana.
No se les hace sospechoso que a situaciones de mayor relevancia no ha ido a visitar ni una sola vez a familiares de desaparecidos o víctimas de violencia, o sea como quien dice ¿el presidente tiene sus propias prioridades o al menos eso nos da a entender?
El Chapo Guzmán se encuentra ahora procesado en los Estados Unidos, donde permanecerá el resto de su vida, luego de ser hallado culpable de 10 cargos por 26 violaciones a la Ley de Drogas y una conspiración de homicidio y según el periodista Sarmiento las visitas del presidente a Badiraguato, donde vive la madre de El chapo y otros de sus familiares cercanos han sido en febrero de 2019, marzo de 2020, julio-agosto del 2021 y esta última en octubre del 2022. Usted mismo saque sus propias conclusiones ante lo evidente.