CHOLULA.- Antes de mi llegada al Movimiento Buena Voluntad 24 Horas de Neuróticos Anónimos, constantemente acudía a los hospitales en busca de alivio para los males que me aquejaban. Recuerdo muy bien que sufría de constantes dolores de cabeza, de dolores musculares y hasta mareos.
Por momentos pensaba que tenía una enfermedad terrible y que me quedaba poco tiempo de vida, lo que me llenaba de angustia, miedo y ansiedad. Sin embargo, también recuerdo que en ese tiempo, por parte de mi trabajo se me hizo un estudio general para conocer mi estado de salud, y el doctor me felicitó, me dijo que gozaba de excelente salud, entonces me sentí muy confundida.
Hablando con el médico y comentándole mis síntomas me sugirió que fuera con un psicólogo y me dio un pase para ir a consulta. Acudí con el psicólogo y me dio un pase para ir a consulta. Acudí con el psicólogo, pero no conseguí sentirme bien, no tenía confianza para comentarle mis problemas con confianza, así que deje de ir.
Decidí buscar ayuda en un grupo de terapia en el Movimiento Buena Voluntad 24 Horas de Neuróticos Anónimos. Me agradó encontrar personas que comentaban haber vivido problemas de salud semejantes a los míos y que comentaban haberlos superado, eso me dio gran esperanza. Al poco tiempo todos los síntomas de enfermedad con los que llegué fueron desapareciendo y empecé a sentirme feliz y tranquila.