CHOLULA.- A quien a quien nunca le dieron este sabio consejo en su vida cuando más enojados estábamos, al menos a mí sí, pero conforme vamos creciendo, la vida nos enseñó que se disfruta más viviendo el presente siendo conscientes de nuestros propios pensamientos, nuestras propias emociones y que el meditar te ayuda a aprender a controlar esos arranques y arrebatos descontrolados, la vida nos pone vivencias impredecibles que muchas veces no nos llevan a ningún lado y hacen que perdamos la cabeza y la objetividad.
El enojo o la ira, nublan los pensamientos y no nos permite tomar decisiones inteligentes, nos gana el cólera, terminamos agrediendo de manera verbal o física contra los demás, sin saber que el día de mañana los podemos necesitar, por eso la famosa frase tan trillada el que se enoja pierde.
Es una gran pérdida de tiempo, responder enojados cuando la situación no nos agrada, cuando no se nos dan las cosas como las habíamos planeado, cuando de la boca se nos cae la sopa, cuando los gobiernos fallidos nos saquean los recursos del pueblo y se enriquecen a costillas del sudor, trabajo y esfuerzo de los mexicanos, pero no por eso vamos a salir a agredir, no saldremos a despotricar, no salimos a matar a los políticos corruptos, lo que debemos aprender muchas veces es a distanciarnos un poco del propio momento que ocasionó nuestro malestar y poder así analizarlo con más claridad, el limitar nuestra propia comunicación afectiva nos alejara de esas personas aduladoras o mal informadas que nos calientan la cabeza y nos incitan a hacer más grande el problema en vez de ayudarnos a ver con claridad.
Cuando uno anhela ser feliz, debemos aprender a observarnos y poco a poco controlar nuestros propios pensamientos y emociones. El tema político de acuerdo a algunos analistas políticos o politólogos dicen que la política en general, tiende hacia una democracia tutelada, de baja intensidad, dominada no por la ideología, sino por los intereses propios de quien ostenta el poder de decisión.
El voto del enojo, es un voto catártico, responde al profundo y extendido malestar hacia las instituciones y sus representantes, este sufragio busca alternativas de los partidos políticos y liderazgos tradicionales. Tal fue el caso de Andrés Manuel López Obrador de MORENA, quien se posicionó ganando con el descontento, enojo, frustración de los mexicanos que creyeron encontrar una esperanza en este personaje que resulto ser una farsa, no ser líder, ni la fuerza que nos respalda, quiso acabar con ciertas formas de hacer política y terminó absorbido por el poder, siendo ahora él “la mafia del poder”.
Por ello de la importancia de la concientización del ejercicio del poder sobre el poder mismo, el darnos el tiempo de conocer a la persona y no al partido, conocer su entorno familiar, conocer una trayectoria laboral, conocer sus valores y sus principios con los que creció, y poder así tomar una decisión más objetiva de los que ahora se postulan para algún cargo de elección popular.
La gente ya no quiere políticos corruptos, prepotentes, fantoches, falso y mentirosos que todos los días nos miente a la cara y nos trata como ignorantes, por eso debemos concientizar el voto del electorado y no dejarse guiar por el miedo, ya conocemos la ineficiencia del gobierno de MORENA y hoy pagamos las consecuencias porque bien nos lo decían los abuelos el que se enoja y vota enojado quien pierde es todo el pueblo mexicano.