VATICANO.- Al final de la audiencia general, Francisco invocó la intercesión de Santa Teresa Benedicta de la Cruz, copatrona de Europa, por la población del atormentado país: «Que su testimonio estimule el compromiso contra toda forma de violencia y discriminación». Llamamiento a los fieles polacos en peregrinación a los santuarios marianos: «Pidan a la Virgen el don inestimable de la paz, especialmente para la querida Ucrania «. Saludo a los participantes en la cumbre de Brasil sobre la Amazonia.
Salvatore Cernuzio – Ciudad del Vaticano
Invocó de ella, Santa Teresa Benedicta de la Cruz, el don de la paz para Europa de la que es copatrona. «A su intercesión confiamos a la querida población de Ucrania, para que pronto reencuentre la paz», dijo el Papa Francisco al final de la audiencia general en el Aula Pablo VI, recordando a Edith Stein, la monja carmelita víctima de la Shoah, cuya memoria litúrgica la Iglesia celebra hoy, 9 de agosto.
«Que su testimonio estimule el compromiso en favor del diálogo y la fraternidad entre los pueblos y contra toda forma de violencia y discriminación».
La intercesión de Edith Stein
Filósofa de origen judío, convertida al cristianismo en su juventud e ingresada más tarde en la Orden de las Carmelitas Descalzas, fue capturada con su hermana en el convento de Echt, Holanda, y deportada al campo de concentración de Auschwitz. Allí encontró la muerte en una cámara de gas el 9 de agosto de 1942. Cincuenta y siete años después, el 1 de octubre de 1999, Juan Pablo II quiso proclamarla copatrona de Europa para levantar, dijo, «en el horizonte del viejo continente un estandarte de respeto,de tolerancia, de acogida» y «formar una sociedad verdaderamente fraterna».
Hoy de nuevo un Papa, Francisco, se confía a ella para hacer reencontrar la paz a una Europa que parece haber perdido el camino del diálogo y de la fraternidad. La misma Europa que el Pontífice, durante la catequesis, dijo haber confiado al Corazón Inmaculado de María, renovando la consagración.Il dono inestimabile della pace
El don inestimable de la paz
Y de nuevo de paz, con un pensamiento especial para Ucrania, habló el Papa durante su saludo a los fieles polacos presentes en la audiencia general. Dirigiéndose a quienes peregrinan estos días a Jasna Góra y a otros santuarios marianos, Francisco -recordando sus propias palabras en el Ángelus conclusivo de la JMJ de Lisboa- quiso compartir «un deseo que llevo en el corazón, el deseo de paz en todo el mundo».
«Preséntenlo a Ella, que es la Reina de la Paz. Pídanle este don inestimable, especialmente para la querida y martirizada Ucrania».
Renovar el compromiso de cuidar la Creación
Ampliando la mirada, el pensamiento del Obispo de Roma llegó hasta Brasil, donde, en Belém do Pará, se inauguró ayer, 8 de agosto, la cumbre entre los países miembros de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (Otca), organismo creado en 1995 por las naciones que albergan en sus territorios la selva pluvial: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela. «Aseguro mis oraciones por el éxito del encuentro», dijo el Papa Francisco, expresando un deseo concreto:
«Que se renueve el compromiso de todos por el cuidado de la Creación y el desarrollo sostenible».