En algunos pequeños poblados de nuestro querido México es muy conocida la leyenda del aullar de los perros, pues la gente suele relacionarlo con la muerte.
Este famoso mito cuenta que la noche anterior a que una persona muera, los perros emiten un aullido escalofriante, lleno de dolor, además de que también es muy común ver que el canino se para en dos patas y posa como si estuviera mirando la luna.
Supuestamente el aullido se debe a que los perros pueden ver a la muerte, lo que ocasiona que también después de que la persona muera se vuelvan a escuchar, pues miran cómo la huesuda se lleva al difunto.
Otra de las historias que se cuentan es que los aullidos también suelen escucharse cuando un desastre natural se acerca y esta teoría inclusive está comprobada científicamente.
Este último punto suena más interesante al saber que en muchos otros países también se piensa de esta manera, tal es el caso de China cuando en el año de 1975 los perros aullaban y mostraban un comportamiento extraño; las autoridades al percatarse desalojaron a la población, y gracias a esa decisión pudieron salvarse muchas vidas, pues algunas horas después un fuerte terremoto sacudió al país dejando graves daños en las edificaciones.
Otro ejemplo es el acontecido en Japón en el año de 1943, cuando los perros aullaron durante mucho tiempo, lamentablemente el augurio se cumplió cuando un terremoto terminó con la vida de más de 140 mil japoneses.
Así es que ya sabes, si escuchas el desgarrador aullido de un perro, es porque probablemente la muerte esté cerca o porque un desastre natural se avecina…