El 27 de noviembre marcharán los beneficiaros y/o acarreados de los programas sociales de la 4T

Por: Jorge GÓMEZ CARRANCO

CHOLULA.- El presidente de la república mexicana Andrés Manuel López Obrador anunció que este 27 de noviembre se realizará una marcha para impulsar su próximo informe de gobierno y en la que se aprovechará para apoyar la Reforma Electoral donde según el planeta la reestructura del Instituto Nacional Electoral (INE), ahora bien, en la marcha del 13 de noviembre fue muy notorio que muchas personas salieron a marchar en defensa del INE, demostrando que están a favor del instituto y en contra de la reforma, donde la mayoría de estas personas no fueron acarreadas ni obligadas a hacerlo.

A diferencia de la próxima marcha que pretender encabezar el mandatario federal serán obligados todos los beneficiaros de sus programas económicos, quien dependen de ese apoyo para subsistir y por miedo a perder su apoyo acudirán a marchar para vestir el evento del presidente, que tristeza que se obliguen a las personas o se le condicionen los apoyos para ir a este tipo de eventos, muy lamentable la verdad que a estas alturas se sigan practicando este tipo de actos, donde los diputados federales de MORENA son los principales operadores encargados de cumplir con la cuota de gente para apoyar al presidente, no nos extrañe que veamos camiones en las esquinas de sus comunidades listos para acarrear a la gente al ángel de la independencia con su clásico lunch.

No podremos comparar las marchas por que la del 13 fue una autentica marcha ciudadana y en cambio la convocada para el próximo 27 será una marcha visceral de los acarreados.

La ciudadanía mexicana de todas las creencias religiosas e ideológicas marcharon positivamente en defensa del INE porque saben que la institución representa algo muy valioso para nuestro País, no hubo agresiones para nadie, no se destruyó ni se atentó contra el patrimonio mexicano, no hubo destrucción de ningún tipo

Muchos se preguntarán ¿Cuál es el motivo? Pues nada más y nada menos que el informe presidencial de los cuatro años de su transformación, donde pretende demostrar que aún hay gente que lo aprueba; es una clara muestra para los opositores para demostrar que aún tiene músculo político y que su popularidad no ha bajado, echando mano de la gente que es beneficiada de los programas sociales y por temor a perder el apoyo acudieran a la dichosa marcha.