Argentina: de la superstición a la pesadilla Por Alejandro MARIO FONSECA

CHOLULA.- Hace 50 años Chile vivió el primer experimento neoliberal a la Milton Friedman: el capitalismo salvaje. Si un capitalismo a secas, sin ninguna concesión a la clase trabajadora. Con Pinochet se impuso la doctrina del shock, es decir, el desmantelamiento del estado de bienestar por el que trabajaba el socialista Salvador Allende.

Poco a poco los chilenos fueron recuperando la dignidad y regresaron a un nuevo intento socialdemócrata, que se enfrenta a nuevos desafíos impuestos por el cambio climático, la globalización y las nuevas tecnologías. El presidente Boric la tiene difícil, pero no imposible.

Mientras tanto, la mayoría de los argentinos, que al parecer no ven más allá de sus narices y carecen de memoria histórica, viven su propio experimento neoliberal. La principal causa es el fracaso del neo populismo ramplón de las Kirchner: una economía en bancarrota, a la deriva, con una inflación monstruosa que impide la certidumbre.

Así que votaron mayoritariamente por un ultraderechista al estilo Bolsonaro, al estilo Trump: Javier Milei. Se trata de un enfermo, de un megalómano que se auto proclama como “el primer presidente libertario de la humanidad” y que propone ni más ni menos que “volver a abrazar el modelo de la libertad para que Argentina se convierta en potencia mundial”.

 

El buen humor de Jorge Luis Borges

Milei llega al poder por la vía legal, por la vía democrática. Ganó con una ventaja de 3 millones de votos (cerca del 12% del padrón electoral) nada despreciable: contundente. Pero ¿qué es la democracia?

Jorge Luis Borges, el argentino gigante de las letras, decía que la democracia es una superstición muy difundida, un abuso de la estadística y abundaba: “¿Usted cree que para resolver un problema matemático o estético hay que consultar a la mayoría de la gente? Yo diría que no; entonces ¿por qué suponer que la mayoría de la gente entiende de política?

La verdad es que no entienden, y se dejan embaucar por una secta de sinvergüenzas, que por lo general son los políticos nacionales. Estos señores que van desparramando su retrato, haciendo promesas, a veces amenazas, sobornando, en suma.

Para mí ser político es uno de los oficios más tristes del ser humano. Esto no lo digo contra ningún político en particular. Digo en general, que una persona que trate de hacerse popular a todos parece singularmente no tener vergüenza. El político en sí no me inspira ningún respeto. Como político.»

Y si, Borges tenía razón. Una superstición es una creencia que no tiene fundamento racional y que consiste en atribuir carácter mágico o sobrenatural a determinados sucesos o en pensar que determinados hechos proporcionan buena o mala suerte. Es, por ejemplo, creer que pasar por debajo de una escalera trae mala suerte; es miedo.

Al menos en este caso los argentinos votaron por miedo, miedo al populismo salvaje al más puro estilo venezolano. Un neo populismo sin ninguna base económica que lo sustentara, sin ningún plan, lleno de funcionarios corruptos montados en el despilfarro, con una inflación endémica que impedía la inversión, que rayaba en la incertidumbre total.

¿Qué dice Xóchitl Gálvez?

Y en México, la candidata de la derecha, al más puro estilo de su “alter ego” Vicente Fox (no sé si se da cuenta) ni tarde ni perezosa felicitó a Javier Milei. “En las últimas 16 elecciones que ha habido en América, 15 han sido ganadas por la oposición, así que el oficialismo va a empezar a temblar también aquí en México porque también aquí habrá una gran participación y ojalá tengan la vocación democrática que tuvo Argentina», apuntó.

La opositora, segunda en las encuestas, recordó que “en México todo el mundo sabe que yo no soy de extrema derecha, saben que soy una mujer de libertades, de hecho, el oficialismo se la vive atacándome por estas posturas, yo lo que reconozco es que en Argentina ganó la democracia y en Argentina no se anduvieron con rodeos y el partido en el poder reconoció la derrota».

Tras el triunfo de Milei, Gálvez, senadora con licencia por el conservador Partido Acción Nacional (PAN), pero también apoyada por lo más corrupto de otrora partidazo PRI y por lo que queda del PRD, felicitó y saludo al pueblo de Argentina.

En su mensaje del domingo en la red social X (antes Twitter), Gálvez escribió: «El pueblo argentino le puso un alto al mal gobierno y los malos resultados. Mi reconocimiento por esta histórica jornada electoral. Felicitaciones al presidente electo Javier Milei».

Como Vicente Fox en su momento la Gálvez piensa que los mexicanos somos ignorantes y que no entendemos nada de política y mucho menos de economía. La situación de nuestro país a pesar de la pandemia de covid y del desabasto por la invasión rusa de Ucrania, dista mucho de lo que sucede en Argentina.

Si algo a cuidado el presidente López Obrador es la economía. Y con todos sus errores su proyecto, aunque lentamente está dando resultados. Ya abundaré sobre este último tema.