ANSIEDAD

 

CHOLULA.- Cuando me encontraba en el sexto semestre de mi carrera, empecé a padecer de mucho miedo y taquicardia, así que siendo muy joven lo atribuí a que tal vez me faltaba hacer ejercicio, así que me comencé a asistir diariamente al gimnasio con la finalidad de relajarme. Todos los días corría y hacía ejercicio, hasta terminar agotado, pero no podía dejar de sentir ansiedad, incluso un buen día hasta me desmayé. Entonces el médico de la escuela me dijo que no podía continuar con ese ritmo de actividad. Eso me dio mucha tristeza.  

  Por otra parte, en mis clases ya no podía concentrarme, sentía temor a participar y equivocarme, así que no podía exponer en clases. En tanto en mi casa me mostraba muy agresivo con mi familia, al grado de gritarle hasta a mi madre.

                Cierto día, que presenciaba un evento deportivo, al que asistí solo como observador, alguien me dio un autodiagnóstico, a través del cual me enteré de qué es la neurosis.

                Asistí entonces a la terapia que ofrece el Movimiento Buena Voluntad 24 Horas de Neuróticos, y desde el primer día comencé a experimentar gran paz.

La ansiedad fue cediendo, al tiempo que pude retomar mis ejercicios físicos.

Continúo en la terapia del Movimiento Buena Voluntad 24 Horas de Neuróticos Anónimos porque gracias a ello, actualmente me desempeño en mi carrera con toda tranquilidad, ya sin tanta aprehensión y disfruto de mi familia con la que conservo muy buena relación.