Editorial
Por Mario SALAMANCA RODRÍGUEZ
Nos preguntamos: las maldades en la tierra
Son grandes llenas de perversidades y sangre
Han dicho los moradores; dios abandono la tierra
Haciendo los hombres males y mi dios no ve
En ciudades mujeres y hombres señalados
Clamando gimiendo a causa de maldiciones
¿Qué haces en medio de todas ellas?
Pasa y mata ¡Ha nadie os perdonéis!
Y no haya en todos ellos misericordias
Mata a viejos jóvenes y vírgenes
Se han llenado de muertos las ciudades
De todos os puntos cardinales en las tierras
¿Has visto las cosas que hacen los hombres?
Nadie debe vivir mata a mujeres y niños
Vemos a seres muertos por pandemias
¡Hay una señal en oros; no te acercaréis!
Canciones tristes a ídolos, hechos por ellos
Maldiciendo, escuchando; mirando a mis hermanos
La ira y furor de dios no serán perdonados
No les escuchará, gritarán a sus oídos, con grande voz
Pasando en medio de ciudades, hay señales
De mujeres hombres justos, haciendo oraciones
No habrá misericordia a los hombres impíos
Mas los justos serán todos librados
Mi señor tiene misericordia de todos vosotros
Por un brve momento fimos abandonados
Él nos dará claridad, viendo los males
Vuelve a mi señor, tendrá de ti misericordia
Mi señor alumbra el camino por donde ir
No deseando como quisiéramos ahora ir
Vosotros no abandonaremos la causa de dios
Con firmeza y valor adelante marcharemos
El buen pastor no abandonará a ciudades y naciones
Los juicios volvieron en justicia a los hombres
Bienaventurados mortales recibe correcciones
Deseando en los días de aflicciones
Si él no me ayudare mi alma muere en silencio
Mi dios ha sido mi refugio eterno
Adelante vamos contra todo mal
Preparando a todos para el día final.