CHOLULA.- La principal razón por la que busqué ayuda en la terapia que brinda el Movimiento Buena Voluntad 24 Horas de Neuróticos Anónimos fue el anhelo de conocer otra forma de vida. Sabía que les causaba daño a mis hijos, pero no podía dejar de drogarme y alcoholizarme, lo hacía porque pensaba que de esa forma me iba a sentir más tranquila y feliz, pero lo único que conseguía era avergonzarme.
Por las tardes me invadía una gran tristeza y sentía deseos de llorar, de desahogarme con alguien y me llenaba de ansiedad, deseaba estar en otro lugar menos en mi casa, donde el ambiente era terrible; todos nos llevábamos muy mal, con insultos y golpes.
Al llegar al Movimiento Buena Voluntad 24 Horas de Neuróticos Anónimos me di cuenta que había buscado la felicidad por mucho tiempo de manera inútil y equivocada, estando aquí con personas que me entienden y me respetan puede cambiar mi vida para bien. Dejé de drogarme y alcoholizarme, ya no siento esa profunda tristeza y he encontrado motivos reales para vivir que me alientan a seguir adelante. En ese sentido la relación con mis hijos a quienes trataba muy mal ha mejorado bastante.