–Pensamientos de una Dama–

“Sobrevivir”

Por: Sandra Liliana MARTÍNEZ ZANELLA

ARKANSAS, USA.- Así pasen muchas tormentas, levántate aún tienes salud para seguir adelante, las enfermedades van y vienen, la actitud con la que tomes cada barrera es la que te hará salir adelante o quedarte en el agujero negro.

Hay personas con discapacidad y nosotros tenemos mucho que aprender de ellas, la manera de ver la vida con una sonrisa, ellas (os) tienen tanto que compartir desde el momento en que empezaron a luchar sus propias batallas.

No es solamente la silla de ruedas, el bastón, la caminadora o las muletas. También los medicamentos, los dolores, los mareos y hasta el poder respirar de la forma correcta a veces cuesta trabajo.

Estamos ante una sociedad que el “Sobrevivir” es un reto, la vida corre sin parar, como el viento que respiramos y las palabras vuelan, pero que estamos haciendo realmente para incluir a la gente con una discapacidad física y mental.

Alguna vez: ¿Has ido a un asilo de ancianos a darles un momento de felicidad? ¿Haz visitado algún ser querido o amistad en el hospital? ¿Has ayudado alguna organización para el cáncer o alguna otra enfermedad? Estas y muchas preguntas vienen a la mente para poder ser un mejor ser humano, hay que aprender a respetar los deseos de quienes nos rodean y sus momentos finales.

Si no eres tú, quien le va a dar los demás una esperanza de vida, sobrevivir a tratamientos, visitas al hospital, días infinitos de quimioterapias o cualquier otra necesidad que tengan en el hospital, solamente tú puedes dar esa luz a alguien más, ellos (as) cuentan contigo, regálales unos horas de tu tiempo y estarán muy agradecidos de verte y de pasar hermosos momentos contigo.

Dios siempre está con nosotros y no nos abandona ni en las peores batallas, nos ayuda a salir adelante, cada que te sientas solo, reza una oración para llegar con fortaleza.

Damas y caballeros abramos los ojos a una realidad que vivimos el día a día, respetemos las señales de gente con discapacidad, ayudemos a la gente de la tercera edad en sus labores diarias, seamos pacientes principalmente extiende tus manos a los que te necesitan.

 

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