Por Salvador ESPINA
CHOLULA.- Las diferentes corcholatas han estado visitando los estados y Puebla no ha sido la excepción. Han visitado la entidad Claudia Sheinbaum, Adán Augusto, Noroña, Santiago Creel, etc. pero la más reciente en venir, apenas hace unos días es la polémica Xóchitl Gálvez o Señora X como la ha bautizado últimamente el presidente de la República.
Durante la visita de la senadora a Puebla participó en varios eventos donde se encontró con empresarios, asociaciones civiles, políticos, ciertos sectores como fue el de los recicladores, etc. pero, sin duda, el encuentro más exitoso que ha tenido aquí como en todos lados es con la misma ciudadanía de a pie. Pues se ha vuelto su mayor fortaleza haciendo difícil que las cúpulas partidistas tengan pleno control del proceso de selección y donde les esta ganado a sus compañeros/competencia del frente, pues es un perfil que está atrayendo ciudadanía y no solo va por la vía en que ella los va a buscar.
En este sentido, se observó en el último evento de la visita, un encuentro nutrido y con buen ánimo, pues fue un evento organizado desde la sociedad civil para la misma sociedad civil.
El evento estuvo a la máxima capacidad del inmueble, así como bien cubierto por los medios de comunicación, pues el tema de Xóchitl se está volviendo un fenómeno más que casual, uno que la encamina a ser la próxima candidata de la oposición a la presidencia de México.
Lo destacado de este evento no fue siquiera el tamaño, porque podríamos decir que en los de MORENA puede haber más simpatizantes, sin embargo, este evento fue un esfuerzo de ciudadanos libres sin filiación política específica más que la de querer un México mejor. Cosa que al partido en el poder le está molestando y preocupando porque este es un sector que probablemente no sea muy participativo y no dependiente de los programas sociales.
Este factor hace crecer el número total de posibles votantes sin que exista algún lazo o control sobre ellos que aseguren la disciplina de estos a la hora de votar. La famosa señora X no solo está logrando posicionarse para ser la candidata y competir en la medida de lo posible, sino que está logrando animar a la ciudadanía a participar y soñar con un país donde se rescaten las instituciones y el mismo Estado de derecho que no sabemos si siga existiendo si se consolida el régimen morenista.