* Familia Tlapaltotoli Ramírez, excelentes anfitriones
Por Epigmenio ROJAS CASTRO
CHOLULA.- El pueblo de San Matías Cocoyotla, vivió una vez más su fiesta patronal, desde ir por la imagen de la santísima virgen de los Remedios, tenerla como invitada principal a un lado de la imagen del santo patrono el apóstol san Matías, en su templo, y el baile popular, recibiendo en sus domicilios a miles de familiares y amigos, para compartir el pan y la sal.
El pasado domingo desde temprana hora inició la actividad en el pueblo, las familias oriundas de esta comunidad, se alistaban para vivir y disfrutar de la fiesta patronal, que en los dos últimos años, no la pudieron vivir como lo marca la tradición por los efectos de la pandemia, el año pasado en pocos hogares se hizo la comida para un grupo muy reducido de invitados, este año como en la época de la pre-pandemia.
En la iglesia se verificaron las actividades tradicionales, como la impartición de sacramentos, como la primera comunión a los pequeños quienes durante un año se prepararon para recibir a Jesús sacramentado, la confirmación de la fe, misas de acción de gracias y el cambio de la Mayordomía.
En las calles los puestos con el pan de fiesta, de distintos sabores como vainilla, mantequilla, nuez; la fruta de temporada, las gigantescas conchas, las fritangas, los peluches, los contenedores de plástico para el “itacate” que les darían , y otros muchos puestos más.
Conforme se iba acercando la hora de la comida, era mayor la actividad de ciudadanos quienes pasaban a visitar al santo patrono a su templo, para luego ir al domicilio de los amigos que invitaron, muchos tuvieron que llegar con un presente a 2 o 3 domicilios, y corresponder a las invitaciones que les hicieron.
La familia Tlapaltotoli Ramírez, recibió a sus amistades a quienes atendió excelentemente, con la comida tradicional para la fiesta del pueblo, el arroz, las rajas poblanas preparadas con queso, jitomate, queso, tortillas, agua fresca, refrescos, cerveza, tratando a todos por igual.
Ahí estuvo la Diputada Aurora Sierra, y en el transcurso de la tarde fueron llegando sus amigos políticos.
Así cayó la noche, el ambiente de lo mejor con la música en vivo que se tuvo durante varias horas, que permitió a los invitados también bailar un rato.