TEXMELUCAN.- Estudiante de secundaria, decidió ayudar a la economía familiar y con ello poder seguir estudiante, así que llegó a su escuela con su cajón para dar grasa a los zapatos de sus compañeros, cobrando 10 pesos por cada par. El maestro al darse cuenta, no le llamó la atención, al contrario lo felicitó.
Escolares fueron sorprendidos cuando un compañero, llegó a su escuela con sus útiles escolares, lo cual parecía ser lo normal, pero también llevaba un cajón con todo lo necesario para asear el calzado, cuando ofreció sus servicios, no faltaron unos cuantos, quienes se burlaron, su mente no les permitía valorar el esfuerzo de su compañero.
La mayoría lo apoyo y le solicitó les limpiara el calzado, por lo cual cobra 10 pesos.
Llegó el maestro, el jovencito estaba en pleno trabajo, y todos en el salón guardaron silencio, esperaban el regaño, sin embargo el mentor tras conocer de voz del jovencito lo que estaba haciendo, lo felicitó y todos aplaudieron a su compañero.
Cuando se desea superarse por el camino correcto, hay muchas maneras honestas de hacerlo, y no esperar que sus papás les resuelvan la vida, o irse por el camino aparentemente más fácil, dejar de estudiar, es luchar para alcanzar el objetivo.