Por Aldo COSTILLA ROJAS
CHOLULA.- En días pasados visité la ciudad de San Miguel de Allende en Guanajuato. Qué sorpresa me llevé. En un municipio de casi 175 mil habitantes se concentra uno de los puntos turísticos más importantes del país. Después de Cancún y Los Cabos no había visto un lugar turístico en México con tantos visitantes extranjeros. Además de la belleza propia de la ciudad (porque el cuidado abarca más del centro) hay un ordenamiento urbano y un nivel económico que refleja la importante vocación turística del lugar y el alto provecho que se le ha sacado.
En los alrededores al centro, en las colonias también se observa un comercio pujante que abarca la renta de viviendas, los negocios de materiales de construcción que proveen a los nuevos edificios y los establecimientos de abarrotes e insumos para consumo de los habitantes. En otras palabras: es un lugar con importante actividad económica.
Además de la fuerte actividad turística de nacionales y extranjeros destaca la vocación industrial e importantes asentamientos de empresas y fábricas en la región del Bajío a la que pertenece San Miguel de Allende por ello es que a diferencia de otros sitios pintorescos del país en éste la actividad económica se percibe en la forma de vida de los habitantes.
Este escenario me hizo reflexionar seriamente sobre lo que ocurre en San Pedro Cholula. Por qué nuestro municipio a pesar de la intensa actividad turística y comercial se siguen presentando tantas carencias y rezago principalmente en juntas auxiliares como Zacapechpan, Coapan o Acuexcomac. En la cabecera municipal se observa dinamismo, construcciones de hoteles e infraestructura pública; en Momoxpan y los fraccionamientos la instalación de plazas comerciales como Explanada y otras más pequeñas; recientemente se construyen edificios con departamentos sin embargo hay una polaridad en la que pareciera que varios puntos del municipio fueran localidades de la sierra norte o que estuvieran a kilómetros de la cabera municipal.
La geografía no es un pretexto, alrededor del municipio se encuentran importantes empresas y fábricas, no es para menos, a algunos kilómetros está Volkswagen y muchas proveedoras y qué decir, es un lugar casi casi de paso obligatorio entre el puerto de Veracruz y la Ciudad de México. Las condiciones no son alejadas de la fuerza del Bajío.
Considero, tras la reflexión, que en San Pedro Cholula ha faltado una visión de desarrollo que contemple proyectos para explotar el potencial turístico de nuestro lugar. Cada gobernante embellece ciertos lugares, el Centro, Zerezotla, pavimenta una calle por acá o por allá sin embargo no se ha ampliado la oferta turística y comercial para beneficio de las localidades más marginadas del municipio. ¿Cuándo se ha visto alguna actividad o un proyecto para que en Tepontla haya más derrama económica, aprovechando el talento de los habitantes y la riqueza de sus tradiciones? ¿Cuándo se ha beneficiado más allá de los escasos negocios de quesadillas la población de Calvario o Coapan por los ciclistas que visitan el Zapotecas?
Es momento de pensar al respecto. Lo más importante es fomentar la actividad económica para aumentar los ingresos y el bienestar de la población cholulteca. Urge y es indispensable impulsar un proyecto de expansión que genere oportunidades y combata la marginación y el abandono en el que se encuentran partes de nuestro municipio.