Poca afluencia de guadalupanos en el cerrito

* Diversos factores influyeron, determinante la salud

Por J. Manuel ROJAS FRANCO

CHOLULA.- Poco fue la afluencia de los guadalupanos al cerrito de la virgen de Guadalupe, comparado a años anteriores a la pandemia del covid-19, principal factor determinante para que muchos optaran en quedarse en casa, o ir al templo del barrio donde se venera la morenita del Tepeyac, con menos personas y así cuidarse un poco más.

Las largas filas de los devotos de la virgen de Guadalupe, que se veían en el pasado, desde el pie de la escalinata, en el atrio y en el interior del templo, no se vivieron en el 2020, y en este 2021, cuando se permitió el acceso al interior del templo, por existir las condiciones sanitarias necesarias, no se vieron tampoco, si concurrencia, pero muy espaciada.

La explanada y plazuela, con puestos tradicionales, comida, antojitos, bebidas, imágenes religiosas, tamales en hoja morada, y otros que solo se ven en esta festividad, ahí los dueños ofreciendo sus productos.

Notorio el ver casi al 100 por ciento de visitantes usando de manera correcta el cubre-boca, de la sana distancia nada se puede decir, no se acató ni por visitantes al santuario, ni comerciantes. La ciudadanía con un alto sentido de responsabilidad, asumiendo que este es el nuevo estilo de vida, si se quiere estar con vida.

Así fueron transcurriendo las horas, muchos siguiendo una tradición con gran devoción, otros aprendiendo, poco niños ataviados con los trajes de este día, ellas de inditas o Marías, ellos inditos o Juan Diegos, todos  con un mismo pensamiento, mismo sentir, el agradecimiento a la virgen de Guadalupe, por permitirles terminar un año más, por protegerlos con su manto, y pedirle que en el próximo 2022, se logre terminar con la pandemia.