La Tlahuanca, se celebró con solemnidad

* Claudio Rosas, una vez más padrino del pulque

Por Epigmenio ROJAS CASTRO

CHOLULA.- La tradicional Tlahuanca, se vivió una vez con la solemnidad que implica en todo el acto religioso, los devotos escucharon misa y recordaron lo que es la celebración, ahí el Mayordomo responsable de dicha tradición, y quien habrá de asumir el cargo en noviembre, y el padrino del pulque, Claudio Rosas, quien como en otros años, fungió con dicho cargo.

El cuarto lunes de cuaresma, lo establece el calendario religioso, se celebra La Tlahuanca, con la participación de los 10 barrios con su santo patrono o santa patrona, según el caso, así como su sequito de alumbradores, de principales y tiachcas, quienes estuvieron presentes de acuerdo al orden establecido desde que se inició esta celebración por parte de la iglesia, ya que sus orígenes datan desde la época prehispánica, cuando le daban gracias a la tierra por la coseche pasada y le pedían su amparo para tener una mejor cosecha.

La celebración la encabezó el párroco Víctor Manuel Domínguez y Mundo, con la participación de 6 sacerdotes más. Prácticamente el templo donde siempre se ha desarrollado esta misa Capilla Real o de Capilla de Naturales, estuvo a su máxima capacidad en ocupación de bancas y un buen número de fieles de pie, o acomodados entorno al atrio principal.

En su momento, se hizo la entrega de las cruces de madera, unas especiales un poco más grande, para los Mayordomos Patronales, y algunos cargos, y otras más pequeñas para los hijos del barrio y uno que otro asistente.

Al finalizar el acto religioso principal, se celebró el bendición del pulque el cual se encontraba en enormes contenedores, dentro de una carpa la cual estaba prácticamente rodeada por quienes llegaron a recibir un vaso con el néctar de los dioses. Tras la bendición fue llevado un poco de ese pulque para regresarlo a la tierra de donde salió, a través del maguey sembrado el año pasado.

 

Finalmente la entrega de la jarra y el jarro con pulque, a cada uno de los Mayordomos Patronales, algunos cargos y la convivencia entre los hijos de cada barrio, encabezados por sus mayordomos.