CHOLULA.- Yo llegué al Movimiento Buena Voluntad 24 Horas de Neuróticos Anónimos porque me sentía muy solo, desintegrado, tenía miedo de ir a la escuela, por la noche llegaba a la casa casi nunca se encontraba nadie de mi familia, sentía mucho miedo porque cuando estaba solo recurría a la masturbación, en las noches me salía a vagar, me sentía muy triste, siempre aislado, no podía integrarme con nadie, me sentía ridículo sin poder hacer chistes ni bromas, entonces decidía alejarme y quedarme en casa.
De las cosas que más me daban miedo era mi sexualidad porque desde niño sentía mucha ansiedad. Descubrí la masturbación a los 8 años, desde entonces no pude dejar de hacerlo, esto me causaba mucha culpabilidad y una sensación de suciedad, pensaba que no merecía el cariño de mis papás y me aislaba de mis compañeros, porque sentía que ninguno hacia lo mismo que yo llegó a ser tan compulsiva esta situación que llegué a tener roces físicos con animales de mi casa, habiéndome generado mucha depresión.
A raíz que descubrí mi preferencia sexual era hacia personas de mi mismo sexo me sentí peor, no lo podía aceptar, tuve miedo a que no lo entendieran, no quería que nadie se diera cuenta. En la secundaria descubrieron mi homosexualidad y todos me hacían burla, esto me causo mucha vergüenza.
Cuando llegué al Movimiento Buena Voluntad 24 Horas de Neuróticos Anónimos me pude sentir mejor, fui aceptándome y queriéndome, me sentía libre porque además nadie me criticó y me siento feliz.