* Tras la irrupción policial en la embajada mexicana en Quito
Por: Jorge GÓMEZ CARRANCO
CHOLULA.- Después de que un grupo de policías ecuatorianas treparan las paredes y vallas de la embajada mexicana en Quito para ingresar al recinto el gobierno de México decidió el viernes 5 de abril romper relaciones diplomáticas con Ecuador. El dichoso operativo tenía como finalidad capturar al ex vicepresidente Jorge Glas, quien está condenado por la justicia de su país por corrupto; México le ofreció refugio en la embajada desde el mes de diciembre del año pasado.
Pero usted se preguntará y ¿quién es Jorge Glas Espinel? Es un hombre relacionado estrechamente con el ex presidente Rafael Correa, quien ayudo a administrar el Fondo de la solidaridad del país, era una institución que buscaba invertir las ganancias generadas por varias empresas de telefonía, electricidad en proyectos sociales, mismo que fue liquidado por el propio Glas en el 2010.
Tras cuatro años en el cargo, en el mes de diciembre del 2017 Glas fue condenado a ocho años de prisión por recibir sobornos de la constructora brasileña Odebrecht un caso que golpeó a varios gobiernos en América Latina. En ese momento Glas era el Vicepresidente de Lenin Moreno, quien había sido elegido en mayo de ese año para suceder a Correa. Y Fue el propio Moreno quien confirmo que Glas ya no ocuparía el mismo cargo de vicepresidente en su gestión; y en ese mismo momento se entregó Glas a las autoridades, tras varios fallos judiciales y gracias a un recurso de habeas corpus, Glas consiguió la libertad condicional el 28 de noviembre de 2022, cuando apenas había cumplido la mitad de su condena, pero sus procesos continuaron su marcha y Glas fue citado a finales del 2023 para que respondiera por otro caso de corrupción a malos manejos de fondos tras el terremoto que había ocurrido en la provincia de Manabí siete años antes. Ahí fue donde entonces Glas busco refugio diplomático en la embajada mexicana.
La irrupción de la policía ecuatoriana en la embajada despertó una reacción unánime de rechazo por parte de los gobiernos de la región y organizaciones internacionales, el gobierno de Nicaragua rompió el sábado 6 de abril sus relaciones diplomáticas con Ecuador en solidaridad con México ante los hechos que calificó como insólitos y repudiables. La presidenta de Honduras repudio este acto como una violación a la soberanía del Estado Mexicano y al Derecho Internacional. El Secretario General de Naciones Unidas Antonio Guterres se mostró alarmado por lo sucedido y dijo que las violaciones de este principio ponen en peligro la prosecución de unas relaciones internacionales normales que son fundamentales para el avance y la colaboración, cooperación entre los Estados. El presidente de Colombia Gustavo Petro rechazo las acciones del gobierno ecuatoriano
Acto nunca antes visto que ha sido fuertemente criticado dentro y fuera de Ecuador, hoy si podemos decir que el Gobierno de Daniel Noboa no tuvo la diplomacia para tratar los asuntos internos de su país y justifico el hecho, como un hecho de aseguramiento en defensa de la soberanía nacional de su país. Creando así una crisis diplomática entre México y Ecuador. Se ha roto la convención de Viena y la Soberanía de México con Ecuador, América Latina y el Caribe, cualesquiera que sean las construcciones sociales y políticas en cada país deben siempre prevalecer vivos los preceptos del derecho internacional en medio de la barbarie.
Las declaraciones hechas por AMLO en las que sugirió que el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio en el año pasado antes de las elecciones ganadas por Noboa había influido en las intenciones del voto, mismos comentarios oportunistas por el ejecutivo mexicano causaron más que molestia a Noboa actual presidente de Ecuador. Recordemos que en plena campaña electoral del mes de agosto del 2013 Villavivencio fue asesinado a balazos a la salida de un mitin en Quito por un grupo de hombres armados. Tales declaraciones de Obrador lo hicieron ganarse en Ecuador la etiqueta de “persona non grata “a la embajadora de México en Ecuador, dando un breve plazo para que abandonara el país.
El alcalde de Quito Pabel Muñoz calificó lo sucedido como inaceptable y vergüenza mundial; también es cierto que AMLO abrió la boca de más y opino sobre un tema ajeno que no nos incumbe respecto de la democracia en las elecciones de Ecuador y declarara lo que declaró, siendo oportunista causando molestia al presidente de Ecuador, claro está que tampoco justifica la acción ejecutada por el presidente de Ecuador contra la embajada mexicana. Es de pena ajena tener como representantes a estos dos personajes. O usted que opina mi estimado lector “ni en las peores dictaduras se había violado una embajada de algún país”.