Por: Angélica DE LOS SANTOS
CHOLULA.- Un poeta escribe con la tinta inagotable de su corazón y es a través de las palabras que plasma su sentir, se convierte en el instrumento de la pasión y el arte. Esta entrega es muy especial para mi ya que gracias a la poesía he conocido personas maravillosas, sensibles y de gran talento, es decir, un #OrgulloCholulteca.
Carmen Lob, es una de ellas; fue representante 2021 de Cholula Power quedando como finalista en el Circuito Nacional Poetry Slam celebrado en el estado de Puebla, ha participado en distintos eventos culturales, y forma parte de un proyecto cuya finalidad será visibilizar el arte en las Cholulas (próximamente les daremos a conocer más detalles) Sin más que agregar, les comparto esta entrevista.
¿Quién es Maria del Carmen Lobato Ramos?
No tengo una palabra que me defina, la edad es la que aparento, cuando alguien la pregunta es tan sencillo responder, la del mismo universo. Recite mi primer poema a los tres años. Choluteca de corazón, poeta hasta la muerte, bailarina y futura abogada de profesión, estoy convencida en que a veces no podemos ser definidos por nuestros logros sino también por los momentos complicados que nos llevaron a ello. La poesía me ha salvado muchas veces la vida así que no temo a usar las palabras
¿En qué momento reconociste que la poesía era el vínculo ideal para expresarte?
Cuando tenía 10 años y escribí mi primer poema. Recuerdo muy bien que no sabía cómo lidiar con la muerte de un ser querido, así que un día tome pluma y una pequeña libreta que después se convirtió en mi poemario personal, donde el desahogo del dolor fluyo, sin embargo, a esa edad ni yo sabía que escribía poesía, pues para mi eran simples cartas con destino: el cielo. Nadie supo hasta ahora que en su momento la poesía ¨salvo mi vida.¨
¿Quiénes son tus poetas favoritos y por qué?
Que injusta pregunta, no lograría tener una poeta o un poeta favorito, pero si me preguntas: Carmen, ¿cómo te sientes hoy? Entonces podría decirte que han decidido hoy mi mente y mi corazón para cultivarse. Es decir, no encuentro favoritas o favoritos sino poetas a tiempo para mi mente y alma. Sin embargo, si me preguntaras, que poetas hombres o mujeres leo más, te diría que hay una chica española llamada Sara Búho, la conocí por primera vez en Puebla y la sigo con toda mi alma desde entonces, sin embargo, Elvira Sastre, Alejandra Pizarnik o Benedetti también me han salvado.
¿Qué es para ti la poesía?
Llevo más de 10 años escribiendo y es la segunda vez que me hacen esta pregunta, sin duda tan difícil de responder como la primera ocasión.
Pienso que podría hacerte una lista de todo lo que no es poesía para mí y aun y ello no lograría concretar un término, pero cuando me haces esta pregunta me imagino en todas aquellas ocasiones en las que hubo dolor en mi vida, un dolor tan profundo que solo pude platicarlo con mis manos y mi mente mientras unían palabras, surgiendo de ahí mis más entrañables poemas.
¿Cuáles son los temas que abordas en tus letras?
Principalmente del dolor de una perdida, pero también he abordado temas sociales como el feminismo o el suicidio e incluso eróticos y de amor propio.
¿La poesía es hija de la inspiración o del trabajo?
De ambos sin duda y pienso fielmente en que siempre deben de ir acompañadas. No podemos imaginar que una poeta o un poeta es aquel ser mirando al firmamento con capucha y sentado en un café, pensando en la inmortalidad. Una poeta es también aquella mujer que lee, se prepara y trabaja en mejorar sus textos, pero también es capaz de reconocer la inspiración cuando la ve.
Al momento de escribir: ¿sigues algún ritual? ¿Cuál es tu proceso creativo?
Esta pregunta me resulta maravillosa te has metido hasta mi templo jajaja. Claro que todas y todos tenemos un ritual y quien lo niegue es porque todavía no se ha dado cuenta que sigue uno. Lo maravilloso de ser poeta es que ese ritual puede surgir en cualquier momento y lugar. Me paso una ocasión en la que iba en el transporte público, los caminos son largos y eso como dicen los “memes”, sirve para reflexionar de la vida, en ese momento vi cruzar la calle a una mujer y en esos días había leído una nota sobre los incrementos del suicidio en hombres y entonces todo en mi cabeza tuvo sentido, cogí lo que tenía en mano para no olvidar la idea y empecé en ese mismo momento a escribir las ideas para después pulirlas. El resultado un poema sobre el suicidio.
Después de ello mi proceso creativo es más interesante, ha evolucionado, sin embargo, he tenido momentos críticos como la muerte de mi amiga la poeta Maty, gran escritora, que me llevaron a encerrarme en una habitación por días, llorar y por fin escribir el texto sin filtros. También podría decir que la mayoría de mis poemas surgen de una idea que va acompañada de un sentir y entonces empiezo a escribir, la adrenalina acelera mi corazón, siento como mi hipotálamo palpita y mis labios degustan el mar más salado que hemos probado, es decir en ese momento ya no soy solo yo sino yo y la poeta.
Y para recitar nada como “El Método de Lee Strasberg”, esa enseñanza se la debo a mi gran amiga, maravillosa e inteligente mujer Daniela Ramírez, egresada del Colegio de Literatura Dramática y Teatro UNAM, para mí es una fortuna contar con amistades como ella o de mi querida Angélica que siempre me han apoyado.
¿Podrías compartir uno de tus poemas con nuestros lectores? Y comentarnos por qué lo elegiste..
Me gustaría compartirles un poema que al leerlo, nos haga reflexionar y elimine la falsa concepción de que este movimiento es una lucha de géneros. Yo lo considero la unión por la no violencia, lo escribí por qué perdí a una amiga a causa de un feminicidio, pero también por qué se que no soy la única que ha perdido a una.
No soy FEMINISTA.
Por: Carmen Lobato Ramos
No soy feminista, pero se lo que es caminar con miedo por una calle vacía.
No soy feminista, solo sé que he perdido a más de una de mis amigas.
No soy feminista, pero he sentido el acoso de las miradas lascivas por la falda que traía.
No soy feminista, pero creo en la equidad y no en la rivalidad.
No soy feminista, pero me gritan “feminazi” cada que camino y replicó “ni una más”, me dejan de escuchar y me empiezan a criticar y dejan de entender que si estoy aquí es por Paulina, Karen, Valeria, Jessica y más que ya no están.
No soy feminista, pero deseo que nuca les falte una.
No soy feminista, pero creo en la lucha de mis amigas.
No soy feminista, pero me uno a ellas si me necesitan.
No soy feminista y tal vez no te conozca pero si eres hombre y luchas por nosotras eres mi amigo y te admiro.
No soy feminista, pero hoy encontraron mi cuerpo sin vida, ya no grito, ya no respiro.
No soy feminista pero hoy mis amigas me recuerdan con un grito.
Para concluir esta charla, ¿Qué consejos le darías a las personas que quieren escribir y aún no lo han hecho?
Escriban el dolor, escriban la alegría, escriban las lágrimas, la tristeza y la pasión, hagan el amor con el lenguaje y permítanse vivir la palabra a través de su sentir y su vivir.
Todas y todos nos gusta ser escuchados y que mejor que a través de la vocación más noble, inteligente y antigua, la poesía.
No teman expresar lo que sienten en palabras, teman esconder lo que realmente quieren ser. Una vez Barry Barish premio nobel de física me dijo que somos los únicos seres conscientes de nuestra existencia así como de que vamos a morir, sabiendo eso preguntemos hoy pues si hemos sabido vivir. Gracias por esta entrañable invitación.