Por: Jorge GÓMEZ CARRANCO
CHOLULA.- Es incorrecto pensar que la política nos es ajena, que por más ideales que se tengan sólo compete a los que están en el gobierno y que la gente “común y corriente” no puede hacer nada para cambiar las cosas, de tal modo que solo hay que preocuparse por “lo propio”, como si lo que sucediese en la política atañe solo a los políticos. Para aclarar esto, se busca a través de esta reflexión analizar diferentes significados y ámbitos de aquello a lo que se llama política, es una indagación del concepto de política y su interacción con otras actividades en las que el hombre se circunscribe, ubicada en el área de la filosofía política, ámbito de las ideologías como valoraciones de las ideas políticas y la reflexión de sus consecuencias en los grupos sociales.
En la actualidad la política ha surgido como un medio por el que se han entablado soluciones o, se justifican conflictos entre las interacciones humanas tanto nacional como internacional: el desmoronamiento de la URSS, la unión europea, la guerra de Irak, el movimiento de los inmigrantes en los Estados Unidos; ¿se puede a través de la política entablar cambios sustanciales en la realidad mexicana? ¿será con las próximas elecciones que las políticas propuestas levanten a nuestra sociedad de la forma indignante de vida, de la corrupción, de la desconfianza en los dirigentes, de la inseguridad? Para ello se necesita: en primer lugar- un conocimiento claro de las exigencias de la población para brindar el beneficio al mayor número posible de personas y –en segunda instancia- auténticos seres humanos que actúen con principios firmes, es decir, los políticos no sólo han de conocer su objeto de estudio que es la realidad social, sino las valoraciones de esta realidad; ya que el pensar y hacer de cada una de sus decisiones, afectan a su pueblo, no pueden eludir la norma moral (al estilo Maquiavélico) que rige sus actos, porque el tratar de hacerlo ya evidencian un tipo de moral. El actuar con valores humanos no le quita objetividad al científico que se dedica hoy a hacer política.
Es así que la política envuelve actividades esencialmente humanas que competen a todos en tanto seres que conforman una sociedad: son acciones humanas referentes al Estado, son fines de un grupo social, es poder en una autoridad, es una actividad inherente a la naturaleza humana, es lo común a un pueblo, es orden público, es dialogo, es un arma de poder, es controversia, es una propuesta de solución a los conflictos sociales, es búsqueda del bien común, todo ello y en lo que en cada momento se convierte, no depende de ella misma, sino de quienes la detentan. En política nada está escrito, cada día se construye a sí misma con el ser y el hacer de los hombres.