“Sospechosismo” 131-C
Por Octavio RODRÍGUEZ FIGUEROA
CHOLULA.- Es lamentable el caso de J.J. Y digo lamentable, por el hecho de que de comprobarse las acusaciones, echará por tierra una carrera política que se veía de gran futuro. No deseo inclinar esta opinión a favor o en contra, ni me mueve ningún interés, pero este caso está mostrando la ingratitud y cochinero en que se desenvuelve la politiquería de San Pedro Cholula.
Malo si se le comprueban los cargos y malo también si no. Después del intento casiqueril, J. J. se está quedando solo. ¿Dónde están sus numerosos amigos y colaboradores que lo seguían en tiempos de poder? ¿Dónde los Calzadilla y otros que casi se le ponían de alfombra para que pisara? ¿Los aduladores y serviles que desaparecieron como por magia? Es triste, pero no debemos adelantar vísperas, porque también puede ser uno más de los shows, a los que nos han acostumbrados.
Todos los funcionarios que la gente sabe que fueron impuestos por J:J: en varios municipios de la región cholulteca, no han movido un solo dedo por él. Se está quedando solo, como réplica pueblerina de Lozoya (El testigo colaborador sobre Odebrecht).
Teniendo la Tripa Vacía, no Puede Haber Alegría
Cambiando de tema, ahora que se vienen los procesos electorales, sería bueno sugerir a todos los candidato participantes, que en su plan de trabajo, incluyan la implementación de UN COMEDOR DEL PERIODISTA CHOLULTECA, puesto que durante el transcurso de la pandemia, hay compañeros que han sufrido hambre hasta por dos días y eso no se puede concebir en un gremio que realiza una función primordial en el desarrollo de cualquier municipio. Es un sector muy descuidado y lo mejor sería garantizarle cuando menos una comida al día, mediante algún bono a quien lo necesite, sin coartar su libertad de opinión, ni sea objeto de control o chantaje. Que quede desde este medio, la propuesta.