Por: Aldo COSTILLA ROJAS
El gobernador Alejandro Armenta ha demostrado en sus primeros meses de gobierno una visión clara: transformar Puebla con acciones concretas, cercanas a la ciudadanía y con un profundo sentido social. Lejos de discursos vacíos, su administración se ha enfocado en resultados visibles que impactan directamente en la vida cotidiana de las y los poblanos.
Una de las decisiones más destacadas ha sido la creación de las Casas Carmen Serdán, espacios de atención integral para mujeres, niñas y niños víctimas de violencia. Este programa no solo ofrece atención psicológica y legal, sino que visibiliza un compromiso real con la justicia social y la protección de los derechos humanos. Más de 6 mil servicios prestados en pocos meses reflejan su eficacia.
En materia de seguridad, los datos hablan por sí solos. Puebla ha registrado disminuciones en delitos como homicidios dolosos, feminicidios y robos con violencia. Esta mejora responde a una estrategia de coordinación entre niveles de gobierno y a la implementación del “blindaje regional”, que fortalece la vigilancia y prevención en zonas clave del estado.
Armenta también ha priorizado la participación ciudadana mediante programas como las Faenas comunitarias y la Obra Comunitaria, donde vecinos deciden y colaboran activamente en mejoras urbanas y rurales. Esto no solo genera infraestructura, sino que fortalece el tejido social y el sentido de pertenencia.
En el campo, se ha destinado una inversión histórica en apoyos tecnológicos para pequeños productores, impulsando la soberanía alimentaria y la modernización agrícola. Esta medida no solo beneficia al sector rural, sino que promueve la economía local y regional.
Finalmente, su enfoque en el deporte como política de Estado es innovador. Con estímulos a más de 700 atletas, centros de alto rendimiento y un decreto que garantiza la continuidad de estos apoyos, Armenta ha demostrado que el desarrollo humano también pasa por el impulso al talento joven.
En suma, Alejandro Armenta ha logrado construir un gobierno cercano, eficiente y sensible, donde el bienestar colectivo y la participación ciudadana son el eje central. Puebla avanza con paso firme hacia un modelo de desarrollo justo, incluyente y sostenible.