Ingredientes para 2 personas
1/2 conejo. Aproximadamente 600 gramos.
50 gramos de almendras
1 cebolla mediana
3 dientes de ajo
1 hoja de laurel
150 ml de vino blanco
2 yemas de huevo duro
1 cucharada de harina
Aceite de oliva
Sal y Pimienta
Preparación
1.- Para comenzar, limpia bien el medio conejo y córtalo en trozos. Asegúrate de que esté bien seco antes de continuar. 2.- Una vez listo, calienta una cacerola a fuego medio con un chorro de aceite de oliva. Cuando el aceite esté caliente, agrega el conejo y sofríe hasta que esté bien dorado. Es importante que todos los lados estén dorados para asegurar una cocción uniforme. 3.- Mientras tanto, prepara la salsa de pepitoria. Tritura las almendras y los dientes de ajo en un mortero hasta obtener una pasta homogénea. 4.- Cuando el conejo esté dorado, añade la cebolla picada y la hoja de laurel y cocina hasta que la cebolla esté transparente. 5.- A continuación, espolvorea el conejo y la cebolla con la harina y mezcla bien. Esto ayudará a espesar la salsa. 6.- Añade el vino blanco a la cacerola y sube el fuego para que hierva y se evapore el alcohol. 7.- Incorpora la pasta de almendra y ajo que has preparado antes a la cacerola y remueve bien para que se integre con el resto de los ingredientes. 8.- Por último, agrega las yemas de huevo duro trituradas y mezcla bien. Este es el secreto de la pepitoria: las yemas aportan un toque cremoso y aterciopelado a la salsa. 9.- Cocina a fuego lento durante aproximadamente una hora o hasta que el conejo esté tierno y la salsa tenga la consistencia deseada. Recuerda remover de vez en cuando para evitar que se pegue.