“La vida”
Por: Sandra Liliana MARTÍNEZ ZANELLA
ARKANSAS, USA.- Los arquitectos geológicos de la tierra los cuales han creado más del 80 % de la superficie de nuestro planeta haciendo bases que han permitido que la vida prospere. Su fuerza es tan explosiva que crea montañas y cráteres. Así estamos hablando de los volcanes que tienen ríos de lava extendiéndose en paisajes sombríos, pero con el paso del tiempo se descomponen las rocas volcánicas, liberando nutrientes de sus prisiones pétreas y conformando suelos extraordinariamente fértiles que han permitido el florecimiento de las civilizaciones.
En la actualidad se considera que hay unos 1500 volcanes potencialmente activos en todo el mundo, cada volcán es diferente algunos estallan en erupciones explosivas, como la del Monte Pinatubo en 1991, y otros eructan ríos de lava en la llamada erupción efusiva, como la actividad del volcán Kilauea de Hawái en 2018.
Cada diferencia se debe a la química que impulsa la actividad fundida. Las erupciones efusivas son más comunes cuando el magma es menos viscoso, lo que permite que el gas se escape y el magma fluya por las laderas del volcán.
Las erupciones explosivas, sin embargo, se producen cuando la roca fundida viscosa atrapa los gases, aumentando la presión hasta que se libera violentamente.
Los volcanes del mundo se forman a lo largo de los límites de las placas tectónicas de la tierra, enormes extensiones de la litosfera de nuestro planeta se desplaza chocando unas con otras. Cuando las placas tectónicas chocan, una de ellas suele hundirse bajo la otra en lo que se conoce como zona de subducción. A medida que la masa terrestre que desciende se hunde en las profundidades de la Tierra, las temperaturas y las presiones aumentan, liberando agua de las rocas. El agua reduce ligeramente el punto de fusión de la roca suprayacente, formando un magma que puede abrirse camino hacia la superficie: la chispa de la vida que despierta a un volcán dormido.
Un peligro particular son los flujos piro clásticos, avalanchas de rocas calientes, cenizas y gases tóxicos que bajan por las laderas a velocidades de hasta 724 kilómetros por hora, todo depende del tipo de volcán y la fuerza natural que tenga desde el cráter.
Por esta razón si vives cerca de un volcán es necesario saber las rutas de evacuación, estar listos para cualquier emergencia. (Documentos, ropa, equipo de primeros auxilios, alimentos y agua) No esperes al último minuto, si ya están en alerta es mejor salir a tiempo, protege a tu familia y mascotas.
Los volcanes son una belleza a la vista, un riesgo el acercarse tanto al cráter y la lava es un peligro, no arriesgues lo más sagrado que tienes: “La vida”