Por: Jorge GÓMEZ CARRANCO
CHOLULA.- Arrepentidos de haber votado por Andrés Manuel López Obrador aplica la frase popular que dice así: “Cuando el barco se hunde, las primeras en saltar son las ratas” pues algo similar ocurre en este gobierno Morenista ya les daré rápidamente un repaso a la lista de los que se han bajado del barco de AMLO, tomando en cuenta a los del mundo intelectual, a los del medio artístico, los científicos, los cineastas, los ambientalistas, los defensores de derechos humanos, démonos cuenta que cada vez son más los que ven en primera fila el desastre de este gobierno y han optado por hacerse a un lado y eso que aún faltan 20 meses, que pueden ser los más duros.
El presidente no ha podido, ni será capaz de entender porque se van tantos y tan importantes personajes, es impermeable a las llamadas de atención de quienes formaron parte de su círculo más cercano, imposible en él un asomo de autocrítica, por el contrario, responde con soberbia y descalifica moralmente a los que lo dejan decepcionados y asqueado.
Para muestra aquí un resumen rápido; comencemos por los cuatro consejeros que el mismo impulso al INE que ahora han denunciado que la reforma electoral es un retroceso democrático y ya los ha descalificado.
Carmen Aristegui moderó la presentación del libro de Lorenzo Córdova y Ciro Murayama respaldando al INE, y fue acusada de traidora.
A Proceso, que tiene como accionista a su ex consejero jurídico Julio Scherer, lo ha tildado de medio de comunicación al servicio de los conservadores.
Se le voltearon tres de los cinco ministros que tenía en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y a los de la Universidad Nacional Autónoma de México que han sido su trampolín por décadas, ya les dijo que ahora son de la derecha así de irónico.
Decepcionada y maltratada se fue Tatiana Clouthier quien fuera su coordinadora de campaña y luego asumió el cargo de Secretaria de Economía, y no nos vayamos tan lejos pues el hombre que escogió AMLO para ponerle la banda presidencial el histórico día de su toma de posesión Porfirio Muñoz Ledo, también declaró que este Gobierno está aliado con los cárteles del narcotráfico.
El doctor Carlos Urzúa su primer Secretario de Hacienda también lo dejo y se volvió un crítico más del feroz gobierno Morenista, su homologo el Secretario del Medio Ambiente también denuncio conflicto de intereses, al igual que German Martínez del IMSS le renuncio y ahora es un duro Senador Independiente.
Recuerdan a la ex morenista Lili Téllez quien fungía como su defensora a ultranza, la presumía entre sus filas en los mítines y hoy es la presidenciable de la oposición del Partido Acción Nacional la carta más fuerte del partido blanquiazul.
Olga Sánchez Cordero la flamante Secretaria de Gobernación de la que tanto alardeaba fue relevada por denunciar la corrupción dentro del Palacio Nacional. Su primera embajadora en los Estados Unidos de América Marta Bárcena. El cónyuge y tío de Beatriz Gutiérrez Müller se volvieron los más críticos del gobierno. Agustín Gutiérrez Canet y Ricardo Monreal han pintado ya su línea; Tonatiuh Guillén este personaje fue uno de los primeros que se fue y abandono el barco cuando vio que el Instituto Nacional de Migración se puso al servicio de Trump. Jaime Cárdenas el hombre que entro a limpiar la corrupción obradorista de corazón en el Instituto para devolver al pueblo lo robado, renunció porque lo querían obligar a violar la ley. En los temas de cultura y democracia está la gran señora Elena Poniatowska que han encendido ya el foco rojo.
Y ni se diga de los Priistas a los que había roto, estos recompusieron la alianza de partidos de oposición y le votaron en contra su reforma electoral, es más el mismo Cuauhtémoc Cárdenas izquierdista de corazón y cuyo hijo Lázaro es el coordinador de asesores de Presidencia ha cuestionado ya el rumbo del Obradorato. Bien aplica la segunda frase popular “De los arrepentidos quiere Dios” así que abran los ojos y escuchen bien, porque las próximas elecciones estarán ardientes.