Por Juan Manuel ZACATELCO
Luto en Puebla
CHOLULA.- A las 3:23 de la tarde la noticia se difundió; el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, ha fallecido. Minutos después (3:29 pm) el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, emitía sus condolencias a través de su cuenta oficial de Twitter. En tanto que hasta las 16:00 horas el Gobierno de Puebla publicaba un comunicado al respecto. El gobierno estatal se queda acéfalo y quedan dos años para terminar el periodo de Luis Miguel Barbosa. El señor Barbosa estaba enfermo.
Una versión refiere que el último fin de semana tuvo una celebración privada y que derivado de ello se habría agudizado hasta un punto crítico su problema diabético. Se habla de un severo conflicto familiar, con los efectos letales que esto suele provocar a un paciente con diabetes. Sea o no, se trata de un personaje que no estaba en condiciones óptimas de salud. Más de una vez se especuló sobre el agravamiento de sus problemas y se comentó que por esta razón vivía permanentemente bajo el cuidado de al menos 6 médicos, algunos de ellos cubanos. Una muerte abrupta como esta, suscita un número infinito de interpretaciones y especulaciones de todos los tonos. Lo único real es que en Puebla el poder máximo se queda sin cabeza y hay que designar a quien lo ocupe. Ya se sabe, no hay vacíos de poder, estos se llenan en cortísimo plazo. ¿Qué pasa ahora?
LEGALMENTE: El Congreso del Estado designará en los próximos 30 días a un gobernador sustituto ante la muerte de Miguel Barbosa Huerta, siendo Ana Lucía Hill Mayoral quien se desempeñe como la encargada de despacho del Gobierno del Estado. El Gobierno estatal tendrá que notificar al Poder Legislativo sobre la ausencia definitiva del mandatario estatal, para que de esta manera se tenga que proceder conforme a lo establecido dentro de las leyes. Una vez que ello se realice y de acuerdo con lo establecido en el artículo 57, fracción XIX de la Constitución Política del Estado, cuando haya ausencia absoluta de la persona titular del Poder Ejecutivo, el Congreso local tendrá que proceder con el nombramiento de un sustituto. “Elegir al ciudadano que deba sustituir al Gobernador de elección popular, si la falta absoluta de éste se presenta durante los cuatro últimos años del período. Dicho funcionario se denominará Gobernador Substituto”, se menciona dentro de la ley. Para ello es que se deberá de contar con las dos terceras partes de los votos de los diputados locales, toda vez que es necesario tener una mayoría calificada. Los legisladores locales tendrán un plazo de 30 días para que pueda hacerse el nombramiento, mismos que comenzarán a correr al momento en que se haga la notificación formal de la ausencia del gobernador. El nuevo mandatario terminará el periodo para el que fue electo Miguel Barbosa Huerta, hasta el 13 de diciembre de 2024.
SOCIALMENTE: Inmediatamente se notó un acelerado movimiento en las más altas esferas de la sociedad con grandes recursos e influencia dentro del estado de Puebla, lo mismo en las esferas a nivel nacional quienes hablaron con los más cercanos al Presidente Andrés Manuel López Obrador para que actuara rápido para evitar confrontaciones, que de hecho se ha notado cordura entre todos los actores; por lo que el Presidente ha confirmado su visita Puebla a los funerales del Gobernador y de paso tomará parecer a todos los mencionados. Los distintos Colegios de Abogados, Contadores etc. Los Notarios, los Clubes de Servicio y por supuesto los grandes empresarios que aspiran todavía a los contratos siguientes de la administración estatal restante y por supuesto la gran preocupación de los que ya los tienen por obras y servicios; todos ellos tratando de influir a lo que su interés convenga y agrupándose para adquirir fuerza dentro de los ámbitos de su competencia.
POLÍTICAMENTE: Iniciando a nivel federal, se tomará la opinión de los poblanos que cuentan con influencia a nivel nacional: Alejandro Armenta Mier, Ignacio Mier Velazco y Manuel Barttlet Díaz. Después a los responsables de la Política Poblana como la Secretaria de Gobierno, al poder tras el trono, Julio Miguel Huerta Gómez; y por supuesto al que se considera el más posicionado de los aspirantes del grupo del Gobernador, el Presidente del Congreso del Estado: Sergio Salomón Céspedes Peregrina. Céspedes era de los preferidos del extinto gobernador, al grado de promoverlo como uno de los aspirantes a sucederlo en el 2024, y parte de su grupo compacto, por lo que seguramente tendría el respaldo de los miembros de su gabinete y la mayoría de los diputados de Morena y el PRI, partido al que perteneció hasta hace unos 5 años y por el cual consiguió ser presidente municipal de Tepeaca y diputado local por esa región del estado, y con él mantiene fuertes lazos a través coordinador de los legisladores de esta fracción, Jorge Estefan Chidiac, y el ex-presidente del Comité Municipal de Puebla, el empresario José Chedraui Budib. Totalmente lo vislumbro puntero con respecto a los otros aspirantes, pues considero que ningún Secretario integrante del Gabinete actual, ningún otro diputado local y ni siquiera un diputado federal alcanzarían el consenso de lograr una mayoría parlamentaria. Por su parte la oposición celebra entre risas escondidas y publica por sí o por adeptos memes burlones y descalificadores del Gobernador difunto en redes sociales al pretender inocentemente quitarse un gran yugo que los obligaba al servilismo y al mismo tiempo influir en la designación próxima; pues consideran una gran oportunidad, en particular los del PAN, la corta ausencia de poder y la reagrupación de Morena. Malas noticias, los acuerdos se están haciendo con prontitud y con miras a establecer una sucesión ordenada y que deje conforme a todos, los japoneses dicen que crisis significa oportunidad… pero yo en lugar de los panistas me iría con más cuidado en mis festejos y absurdos comentarios, No saben lo que les están preparando. Pero bueno, al tiempo. Nos veremos pronto.