Por: Jorge GÓMEZ CARRANCO
CHOLULA.- Usted seguramente ha oído hablar de Miguel Negrete Novoa; brevemente les puedo decir, que Negrete fue originario de Tepeaca, Estado de Puebla, un militar mexicano, que participó durante las guerras civiles del siglo XX, así como durante las intervenciones de Estados Unidos y Francia; fue ministro de guerra durante la presidencia de Benito Juárez. Durante la segunda intervención francesa en México, él nos mostró a todos los mexicanos, que su ideología partidista no era prioritaria, siendo conservador se pasó al lado de los liberales, al ver que las tropas francesas avanzaban al centro del País y es recordado por su frase célebre diciendo “Yo tengo patria, antes que Partido”.
Bajo las órdenes del general Ignacio Zaragoza, ambos se cubren de gloria en la batalla de las cumbres y en la batalla de Puebla (5 de mayo de 1862), llegando a ser considerado como el segundo héroe, pues defendió, el Fuerte de Loreto con 1,200 soldados. Negrete apoyó a Porfirio Diaz en la revolución de Tuxtepec en 1876, bajo el principio de “que ningún mexicano se perpetúe en el poder y ésta será la última revolución”, así como su lema de “Sufragio efectivo, no reelección”
Por eso mismo, les digo que, si no conocemos la historia, estamos condenados a volver a repetirla; y en vano, la lucha de aquellos hombres que dieron su vida, mantener una democracia y un sistema político, ha sido muy difícil; erradicar el poder concentrado en una sola persona ha costado la vida de muchos.
Hoy por hoy puedo decirles, que ya no valió la pena, porqué se los digo, recordemos que el partido MORENA, quien, a través de su supuesta consulta ciudadana, del ahora presidente de México, aprobaron la reelección a los cargos públicos, poniendo en peligro latente nuestro sufragio democrático que ahora está viciados. Vienen tiempos de renovación de mandatos y les puedo asegurar que tendremos una contienda electoral, sin piso parejo; porque se los digo, miren, para muchos nos queda claro, que habrá candidatos gubernamentales (absorbidos por un sistema y con todo el aparto de gobierno): candidatos partidarios (sociales y comunes de la oposición); candidatos independientes (los que para registrarse les piden las perlas de la vida). Pero si creen, que sólo fue Negrete quien es precedente de que Aliarse no es tan malo, como nos la quieren vender ahora los MORENOS, déjenme les platico de:
Enrique Gorostieta Velarde, originario de Monterrey, Nuevo León, quien también fue un militar mexicano y participó en la revolución mexicana, así como en la guerra cristera; él al principio, no compartía la gran devoción religiosa de los cristeros y se decía ser masón y jacobino. Pero que sucedió, porqué al final es recodado por esa lucha cristera, déjenme les platico que su valor y el genio militar de este hombre fue fundamental para la causa cristera, pues a él le toco reorganizar, entrenar y disciplinar al ejercito cristero, donde la gran fe de sus soldados, hicieron que él se convirtiera al catolicismo, descubriendo la auténtica cristiandad. El que cambiara su ideología de creencias no lo hizo aberrante, al contrario, paso a ser parte importante en la historia de nuestro país. Dejo precedente de que cambiar, unirse, aliarse, no es tan malo, como ahora MORENA lo hace saber a la ciudadanía mexicana, más bien, los morenos tienen miedo a la Unidad de sus opositores, saber que, en tan poco tiempo, puede perderlo todo. Así es, como nos damos cuenta, que cuando se ama a un país, más que a los intereses mezquinos o partidarios, se pueden lograr éxitos y triunfos históricos.
Estamos viviendo tiempos difíciles, son tiempos de unidad, tiempos de ser solidarios, de tener empatía social y no ser indiferentes ante la crisis; el peligro inminente que ya padecemos o vamos a padecer respecto de una crisis, llámese económica, política, democrática, social, de violencia, de inseguridad, de narcotráfico, de salud, etcétera. Considero, que no hay acción que se justifique o se critique, cuando la conducta moral es obligatoria, cuando la coincidencia del deber, es mutua, cruzarse de brazos o ser espectador, te hace cómplice de la destrucción, y retomando palabras sabias de don Napoleón Bonaparte, les puedo resumir que las acciones no se justifican cuando “el fin, justifica los medios”.
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